miércoles, mayo 17, 2006

La Infamia




Uvas maceradas en bilis,

-desesperanza inacabable

en el sabor huraño del ultraje-,


ázimo pan que se muerde y es arisco,

canto de los salmos en ofrenda de la sangre,


brusco despertar de los estigmas

cuando ya no se tienen más que llagas devoradas


por el fuego

el dolor

y la ignominia.




© Juan José Mestre

1 comentario:

Anónimo dijo...

Toda infamia duele Juan, solo hay que percatarse de ella, de nuestro dolor...
Buen texto.
Un abrazo Gus...