sábado, noviembre 25, 2006

DE PRONTO

De pronto, el cielo vira sus azules hacia el gris de la tormenta. Un viento solapado borra los subrepticios surcos de los sembradíos que se cubren con la cerrazón de las espigas. La pampa viste sus ancestrales ropajes: el llano desnudo que vuelve a la malignidad congénita de elementos desatados a fines de noviembre. Es noche. Un centauro hace un bies entre las nubes. Se sabe que en un rato la mansedumbre volverá sobre sus pasos. Pero para entonces puede que nada sea igual, nada.



© Juan José Mestre

2 comentarios:

Anónimo dijo...

me encantó la amalgama entre su texto y la fotografia...Se puede percibir hasta el aroma a humedad de la tarde...

Un cordial saludo desde este húmedo puerto de talcahuano-chile...

bianca estella

Luli dijo...

Luminoso y transparente...

Besos