sábado, marzo 13, 2010

ROJOS (IV)


 

 

La metáfora es simple: el rojo es el color del infierno, pero también lo es el de la sangre. Casi siempre se hace uno; como todo es número en el cosmos, así lo es el rojo de la vida o de la muerte; una estrella que se apaga vira al negro conclusivo, pero antes, apenas un instante antes, se tiñe de rojo. El Apocalipsis se refleja en el rostro envejecido de un niño que llora solitario. El Apocalipsis es el omega, el ocaso,  el final, el rojo. Quizás también sea el comienzo, como el alba enrojecida de un día cualquiera.

 

 

© Juan José Mestre

No hay comentarios.: